
Desde un contexto contemporáneo ubicado en Los
Ángeles, actores y director se aprestan a llevar a escena teatral una obra
basada en aquellos días de 1915 en Armenia. Un pequeño recorte que conlleva una
carga emocional en un matrimonio (actriz y director) que incita a pensar en
algo más, en un transfondo que lentamente se va convirtiendo en la trama
principal, en el motivo de la obra teatral.

Actores, banda sonora, ambiente (circunscripto
a un escenario y sus bambalinas) de alta calidad; un film que no puede pasar
desapercibido a un espectador que aprecie un guión sobre un tema muchas veces
abordado, pero que se transforma para redescubrir la intimidad del genocidio en
manos de los turcos.

Casi dos millones de asesinatos marcan una
distancia, casi una imposibilidad; sumado a que después de cien años Turquía
sigue sin reconocer el exterminio programado iniciado, en un pueblo
mayoritariamente cristiano, un sábado santo y que duró dos años. Algo difícil,
sin duda y que podría ser catalogado no solo como imposible, sino también injusto.
Sí, un film para ver.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
SUMÁ TU APORTE......