Una comedia mexicana que se sostiene desde un
sutil humor negro y las oposiciones religiosas en una familia. Son múltiples
las posibilidades de ver en este arte las discrepancias entre matrimonios y
separaciones, en este caso algo interesante es ver después de 30 años de
separación matrimonial, la relación que esta pareja y el entorno mantuvieron.
Una esposa viviendo un judaísmo ortodoxo y un
esposo ateo, mediando hijo, nuera, nietos y la religión.
Nos podríamos quedar en el aspecto de una simple
comedia, pero el título del film nos brinda necesariamente un análisis mucho más
profundo y nos invita a penetrar en las actitudes y personalidades que quiere
mostrarnos la directora, en especial con la psicología de una Nora que sólo ha
estado ausente esos cinco días.
Pensar en como fue la vida de Nora, hacer una
regresión imaginativa, nos puede llevar a un abordaje de la psiquis humana que,
si bien linda con lo patológico, denota actitudes cotidianas que poseemos en la
familia.
Necesariamente al finalizar el film, hay que
volver a mirar los minutos iniciales del mismo, hay algunas imágenes y signos
que sólo se aprecian cuando ya se vio la película.
Nora: muchos años presente, cinco
días sin ella.
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